El Cristo de la Expiración recorrió las playas de San Telmo en una gran jornada

Salió el Cristo de la Expiración ayer y lo hizo para bajar a las playas de San Telmo, a la parroquia de San Rafael. A hombros de sus cargadores, la imagen salía cercana las nueve de la mañana, rayando el alba sobre su Ermita, mientras Nuestra Señora del Valle se quedaba esperando a la tarde, que fue cuando el Cristo regresó a su templo.A hombros de sus cargadores, la bendita talla bajó hacia la parroquia de San Rafael dejando momentos para el recuerdo. Los cincuenta años que cumple la parroquia de San Rafael fueron bendecidos con la llegada del Cristo de la Expiración al templo, que acogió una eucaristía con la presencia del obispo de la ciudad, don Juan del Río Martín, en la que se recordó con cariño la década de los cincuenta y sesenta, cuando las imágenes salían en vía crucis desde el centro de la ciudad hasta los barrios más periféricos.

Devoción

Con esta intención, con la de volcar toda la devoción del Cristo de Jerez en la parroquia de la zona Sur, apareció la cofradía que preside temporalmente Esteban Magán por las puertas de la ermita de San Telmo. Con esta, y con muchas más, puesto que la Bolsa de Caridad Nuestra Señora del Valle, que cumple diez años y sigue siendo una de las más activas de la ciudad, aportó a Cáritas de San Rafael una importante cantidad de bolsas de alimentos para repartirlos entre los más necesitados del barrio, dando una nueva dimensión a la caridad cristiana aplicada en las cofradías.Tras la misa, la imagen estuvo el resto de la jornada en solemne ceremonia de besapies, hasta que los hermanos del Cristo decidieron regresar a su ermita, saliendo de la parroquia sobre las siete y media de la tarde y dando mayor realce al primer domingo de Cuaresma.En realidad, la hora prevista de salida eran las seis de la tarde pero la multitud de personas que abarrotó el besapies de la imagen hizo que se retrasara todo en una hora y media.

Informa: La Voz Digital

Fotos Autor: © Javier Romero Díaz