Noticias de la Semana Santa de Jerez y Sevilla

viernes, marzo 21, 2008

Jerez. El espíritu dominico volvió a hacerse presente en Jerez

Poco a poco hacía su aparición el nutrido cortejo de nazarenos, unos 200 ayer. Antes de la salida del paso de misterio, la gran novedad que la Hermandad sacó a la calle, el nuevo guión bordado en los talleres de Ildefonso Jiménez. Tras ellos, hacía su aparición otro de los grandes canastos de Guzmán Bejarano que procesionaron en la pasada jornada, que fue en su día Premio Nacional de Talla. Arriba, la imagen de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto, obra del escultor gaditano Juan Luis Vasallo Parodi, y detrás, el Ángel Confortador, también del mismo autor. El Señor, mirando al cielo y agarrando un cáliz, símbolo de su pasión, transmitió una gran serenidad a todos los que ayer tuvieron el privilegio de verlo por las calles de nuestra ciudad. El paso de misterio, volvía a llevar este año un exorno floral formado por distintas plantas silvestres, a semejanza de lo que pudo ser el huerto de los olivos de hace más de dos mil años. Al martillo repitió un año más Manuel Ballesteros y detrás, la Banda del Santísimo Cristo de la Caridad, que está completando una gran Semana Santa. Tras el cortejo del palio, la Virgen de la Confortación salva poco a poco el dintel de la puerta de Santo Domingo para salir, un año más, al encuentro de Jerez. A su lado, una de las imágenes secundarias más destacadas de cuantas procesionan en Jerez, un Ángel Confortador, que intenta consolar a la guapa Virgen dominica. A los mandos del llamador, José Luis Sánchez López. Como exorno floral, rosas de color rosa, que crearon un contraste precioso con el palio azul de la Confortación. Bonito momento en su recorrido fue el paso de la Hermandad por el monumento a la Virgen del Rocío en la plaza Aladro. Y es que, hay que recordar que la Hermandad del Rocío radica también en Santo Domingo, radicando su simpecado en el templo dominico. La entrada en Carrera Oficial también fue muy bonita, con el cuerpo de nazarenos muy ordenados y juntos, el misterio dio una lección de buen hacer bajo las trabajaderas con los afinados sones detrás de la Banda del Santísimo Cristo de la Caridad. Su vuelta por Tornería, con la calle a rebosar de público ávido de cofradías y su entrada en Santo Domingo fue el perfecto prolegómeno de una larga madrugada.

Informa: La Voz Digital