Noticias de la Semana Santa de Jerez y Sevilla

lunes, mayo 12, 2008

Jerez. La Virgen ya está en la calle y el tiempo se detiene para los romeros

La Virgen ya está en la calle. Se cerró esta edición enmedio de la expectativa que, concentrada en la llegada del simpecado de la Matriz de Almonte al santuario tras el Rosario de las Hermandades, latía ante la inminencia de la apación en las calles de la Aldea de la imagen de Nuestra Señora del Rocío.
La Virgen ya está en la calle colmando el ansia de cuantos romeros hicieron terminar sus respectivos caminos ante la blanca concha de la fachada de un templo que se halla cuajada de miradas que aguardaban el salto. Así terminó el Domingo de Pentecostés, un día para encontrar en la celebración de la Eucaristía el sentido litúrgico de la fiesta.
La Misa del Real fue, por la mañana, ante la estatua de piedra que reproduce a la Blanca Paloma, la concentración de los rocieros de todas las hermandades. Ciento seis corporaciones hicieron presentes sus simpecados en el retablo colorista que es tradicional fondo de la celebración. Ciento seis los hermanos mayores que juraron las reglas en la protestación de fe.

sostén de los apóstoles

“Ella sostuvo a los frágiles apóstoles” subrayaría monseñor José Vilaplana Blasco en su homilía instando a los fieles en el sentido de que “nosotros que hemos bebido del manantial del Espíritu Santo, y habiendo tanta sed de Dios, es ilógico que no compartamos nuestro descubrimiento”. La profunda convicción de la misión de los rocieros en el mundo se hizo patente en su palabra.
El obispo onubense no olvidaba en sus palabras el sentido misionero que subyace, este año, bajo la convocatoria tradicional de la Romería. “Deberíamos vivir, aquí en El Rocio, la misma experiencia de los apóstoles”, dijo. Como también recordó que “Maria nos enseña que es necesario ser oyentes de la Palabra si queremos ser servidores de la Palabra”.
El prelado dijo que “Ella nos enseñó desde su actitud de no comprender a veces las palabras de su hijo pero seguía las huellas del que fue su hijo y su maestro hasta, incluso, estar de pie al pie de la cruz”. Para el ordinario de la Diócesis de Huelva “los cristianos necesitamos una mayor familiaridad con la Palabra, especialmente en el Nuevo Testamento”.

un orfan ato rociero en el congo

El pastor de la Iglesia de Huelva aterrizó más expresamente en s la intención de su predicación señalando que “la misión no se realiza sólo con palabras, necesita signos”, continuó. “Evangelizamos con nuestro hablar y nuestro hacer”, añadió. La homilía tenía fundamento y actualidad en la certeza de que “esta celebración de El Rocio tiene un marcado carácter misionero”.
Cabe recordar que la Novena previa a la Romería tuvo sus eucaristía al cargo de diversos misioneros aunque el obispo se refirió más directamente al orfanato que, a instancias de la Hermandad Matriz de Almonte será contruido en la Republica Democrática del Congo. Vilaplana agradeció su colaboración “a todos los que haréis posible ese signo de esperanza”.

el encuentro joven de julio

Tampoco olvidó monseñor Vilaplana una cita que hará de la Aldea, los próximos 16 al 19 de julio, lugar de encuentro de jóvenes del sur de España como alternativa al que, esos mismos días presidirá Benedicto XVI en Australia. Para todos es mucho más fácil venir a El Rocío que ir a las antípodas. Oración, catequesis, conciertos o conexiones con Australia lo nutren
Y el obispo de Huelva aprovechó esta homilía de la Misa del Real para agradecer a todas y cada una de las hermandades su disposición de la casa respectiva a la acogida de sus participantes. Mirando más allá de la propia Romería de Pentecostés, las palabras de Vilaplana fueron, pues, escaparate de unos objetivos rocieros que expanden sus iniciativas.

tiempo detente

Pero la Virgen ya está en la calle. Y para aquellos que han hecho el camino pensando en este momento no hay mirada más allá. Llegará todo lo demás en su debido momento. El tiempo ahora se para ante María Santísima.

Informa: Jerez Información