Noticias de la Semana Santa de Jerez y Sevilla

lunes, julio 02, 2007

"He aquí uno de los grandes de Jerez"

"He aquí uno de los grandes hombres de Jerez". Con estas palabras inició monseñor Juan del Río Martín, obispo de Jerez, la homilía que dedicara a José Alfonso Reimóndez López, "Lete", ayer en el transcurso de su funeral en la capilla de Las Angustias. Miles de personas acudieron a la sede canónica de la Hermandad de las Angustias para dar el último adiós al conocido decorador, cofrade y político jerezano. La práctica totalidad de los miembros de la actual corporación municipal, con la alcaldesa al frente, así como numerosos ex concejales acudieron a la recoleta capilla. Junto a ellos acudieron multitud de empleados municipales, cientos de cofrades de la práctica totalidad de las cofradías jerezanas, tanto de las de penitencia como de las de gloria, además de amigos, conocidos y familiares. La Hermandad de Nuestra Señora de las Angustias, con su junta de gobierno en pleno, también honró a este cofrade que llegó a ser hermano mayor y medalla de oro de la corporación.

La afluencia de personas alcanzó tales niveles que varios cientos de ellas tuvieron que escuchar la misa desde la misma plaza de las Angustias porque en la capilla, desde muchos minutos antes de que diera comienzo la misa de corpore insepulto, ya no se cabía.

Recordó monseñor Del Río Martín cuándo conoció a "Lete", que fue exactamente hace siete años, cuando llegó a la ciudad para ejercer su labor apostólica. Igualmente reconoció ante los fieles que desde que tuvo constancia de que lo irremediable estaba a punto de suceder, pidió permiso a Roma para poder ausentarse de la ciudad eterna, volar a Jerez a toda prisa y poder hacer lo que ayer hizo: oficiar el funeral de quien él calificó como "un gran cristiano".

Fue un hombre, dijo el prelado jerezano, "que siguió firmemente las enseñanzas del Papa Juan Pablo II, las mismas que animaban a los cristianos a tomar parte en todas las facetas de la vida pública y no quedar en silencio", algo que José Alfonso Reimóndez hizo dedicándose cuatro años a la política, de 2003 hasta el pasado 27 de mayo, así como siendo presidente de la Unión de Hermandades de Jerez de 1999 a 2002. Esa fue la contestación del obispo a quienes en su momento no entendieron el salto de "Lete" desde las cofradías a la política.

"Amaste apasionadamente a la Virgen y le diste lo mejor de ti", le dijo el obispo antes de definirle como "un ángel" al que pidió que intercediera "por las hermandades y las cofradías, por todos nosotros y por esta ciudad para que progrese en trabajo y convivencia pacífica y para que los hombres y las mujeres que viven en la vida pública busquen siempre el bien y los intereses generales".

Acto seguido dijo a Teresa Bellido, su viuda, "no te quedas sola, Tere, tienes a tu familia y también tienes junto a ti a toda la familia de esta ciudad, porque Lete engendró tanta amistad que el Señor le dio una familia numerosa".

El obispo concelebró el funeral junto a Ángel Romero Castellanos, párroco de San Miguel, Antonio López Fernández (co-párroco de San Marcos) y el párroco de La Granja. Fue Antonio López, sacerdote y primo del finado, quien desde el altar dio las gracias en nombre de la familia a todas las personas que la han apoyado en estos duros momentos.

Entre las representaciones políticas las de mayor grado fueron las del Partido Popular, organización por la que "Lete" fue concejal electo hasta los últimos comicios. Así, acudió el secretario general andaluz del partido, el jerezano Antonio Sanz, y el presidente provincial de los populares, José Loaiza. Junto a ellos, infinidad de concejales, militantes y simpatizantes del PP, con María José García-Pelayo, portavoz municipal y ex alcaldesa, al frente.

Cabe destacar que incluso quienes no pudieron acercarse a la capilla de las Angustias por razones de fuerza mayor hicieron cuanto pudieron para dejar testimonio de sus sentimientos hacia "Lete" Ese fue por ejemplo el caso del tenor jerezano Ismael Jordi, que le dedicó su actuación del pasado sábado en Toulousse (Francia) donde representa con gran éxito la zarzuela "Doña Francisquita".

Una vez recibida la bendición, el féretro con los restos mortales de José Alfonso Reimóndez "Lete" fueron conducidos al cementerio católico de la ciudad para su inhumación. El ataúd fue cubierto con la bandera de la Hermandad de las Angustias, corporación nazarena de la que fue hermano toda su vida.

Informa: Diario de Jerez