Noticias de la Semana Santa de Jerez y Sevilla

lunes, marzo 17, 2008

Jerez. El Perdón dejó su sello de cofradía elegante

Son sólo dos años los que lleva la hermandad del Perdón en el Domingo de Ramos, pero parecen muchos más. Y es que la corporación que preside Manolo Salado ha cogido un tono de cofradía señera que está permitiendo a muchas personas conocer a fondo a una hermandad que hasta hace poco, en la Madrugá, pasaba casi desapercibida. Unos 150 nazarenos acompañaron ayer en su caminar al Cristo del Perdón y a María Santísima del Perpetuo Socorro, que estrenaron las nuevas túnicas de cola, con la novedad de la botonadura de color burdeos y el escudo de la hermandad bordada en oro sobre fondo azul. Destaca en el cortejo la gran cantidad de monaguillos que saca a la calle. Protegidos con sus capuchas para evitar la cera de los cirios que portan los nazarenos, esperan a alcanzar los doce años para poder vestir la túnica nazarena de su cofradía. Tras el cortejo del misterio, el joven y valiente Cristo que saliera de las gubias del jerezano Francisco Pinto Berraquero. Manolo Salado, hermano mayor de la hermandad, se lamentaba en la pasada cuaresma que, por este motivo, por los cánones tan diferentes de este cristo con respecto a los demás que procesionan en nuestra ciudad, una gran parte de los jerezanos no saben ver al Cristo del Perdón. Simplemente, ellos se lo pierden. Bajo sus pies, un monte de claveles sangre de toro sobre el paso de estilo barroco que realizara el sevillano Antonio Martín. A los mandos del misterio, Manuel Jesús Tristán, que este año también se hacía cargo del paso de palio en lugar de Sebastián Ruiz, que lo hizo el anterior. Tras el caminar largo y racheado del Cristo del Perdón, María Santísima del Perpetuo Socorro, la que tantos años acompañara a los pies de su barbilampiño hijo en el mismo paso de misterio, camina elegante sobre un paso de palio que poco a poco va completando el bordador jerezano Fernando Calderón. Es este uno de los palios más peculiares de nuestra Semana Santa, de los llamados de cajón, en terciopelo burdeos. Pero lo que llama más la atención sus tres enormes faroles de cola que le dan al palio un sello propio. En cuanto al exorno floral, rosas de color champán, flor esta que en los últimos años le está ganando la partida al tradicional clavel blanco. Un año más, la primera marcha de palio que sonó en nuestra Semana Santa fue amarguras, en recuerdo a la antigua advocación que tuvo la virgen cuando era imagen titular de la Hermandad de la calle Medina y que fue interpretada magistralmente por la Banda de Música Gailín, de Puerto Serrano, que durante todo el recorrido interpretó un cuidadísimo repertorio de marchas fúnebres Homenaje a la Defensión Después dejar atrás el Arco del Arroyo, en lo que se ha convertido en una de las estampas clásicas de nuestra Semana Santa, llegó la hermandad a la Carrera Oficial estrenando su paso por la calle San Juan de Dios con el bonito detalle de que Nuestra Señora del Perpetuo Socorro lo hizo a los sones de Cristo de La Defensión, de Abel Moreno, en homenaje al cincuentenario que la corporación del Martes Santo ha celebrado recientemente. Con la caída del sol, la hermandad fue ganando en sobriedad y recogimiento, algo que el pueblo de Jerez supo corresponder con su más sentido respeto.

Informa: La Voz Digital